El mito dice que Prometeo era un titan protector de la raza humana, que les enseño muchas cosas a los hombres para sobrevivir, como la navegacion, la medicina, como debían hacer los sacrificios para complacer a los dioses, y finalmente robó el fuego del cielo para dárselo a los hombres, Zeus lo condenó por tal osadía y lo encadenó a una roca en una montaña entre la tierra y el caos, donde cada mañana venia un águila a picotear su hígado y se iba al atardecer, de noche el hígado se reparaba y de esta manera, día a día se renovaba el tormento. Zeus ordenó que debía permanecer allí hasta que otra criatura ofreciera a encadenarse y ocupar su lugar, pasaron miles de años cuando un centauro llamado Quiron ofreció a encadenarse, cuando llegó a la roca Zeus lo convirtió en una constelación de estrellas, finalmente el héroe Hércules mató al águila y de esta manera termino la agonía eterna de Prometeo.
Cierto es, a lo largo de la humanidad han surgido Prometeos que han señalado hitos de heroísmo y sacrificio, han renunciado a ser ellos mismos para entregarse a las causas de los hombres, no todos han sido comprendidos, adelantados a su época, mas de uno ha sido perseguido, inclusive por los que pretende salvar, algunos no han salido del anonimato, otros han trascendido a la gloria, los que menciono fueron perseguidos y dieron la vida por sus ideales, a manera de ejemplo, sin agotar la lista, se me ocurre Cristo, el Mahatma Gandhi, Marin Luther King, los indígenas Atahualpha en Perú y Agustín Agualongo en Colombia, que igual que Prometeo se hicieron amigos y dieron la vida por los hombres.
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